«No es abuso, es agresión» fue una de las consignas más cantadas en las manifestaciones de protesta contra la Manada. Cientos de miles de mujeres en nuestro país corearon, con rabia y con esperanza, esta brevísima frase que, en Derecho, encierra una diferencia abismal.
Ahora, la conocida como ley del «Solo sí es sí» hace desaparecer el término abuso, sustituyéndolo, en todos los casos, por agresión. Las penas son mayores y, sobre todo, la connotación del término no ofrece ningún tipo de ambivalencia.
La ley incluye otras novedades sobre acoso callejero, «nudes» no solicitados, sumisión química, acoso y agresión sexual digital…
Y no se olvida de los derechos de las mujeres: derecho a la información, al asesoramiento, a una ayuda económica en caso de no contar con una renta mínima, derecho a no ser expulsadas si se encuentran en situación administrativa irregular..